Emancipación Espiritual.
Salmo 5 El Señor me libró de todos mis temores.
Del maestro de coro. Para flautas. Salmo. De David.
2.Escucha mis palabras, Yahveh, repara en mi lamento,
3.atiende a la voz de mi clamor, oh mi Rey y mi Dios. Porque a ti te suplico,
4.Yahveh; ya de mañana oyes mi voz; de mañana te presento mi súplica, y me quedo a la espera.
5.Pues no eres tú un Dios que se complace en la impiedad, no es huésped tuyo el malo.
6.No, los arrogantes no resisten delante de tus ojos. Detestas a todos los agentes de mal,
7.pierdes a los mentirosos; al hombre sanguinario y fraudulento le abomina Yahveh.
8.Mas yo, por la abundancia de tu amor, entro en tu Casa; en tu santo Templo me prosterno, lleno de tu temor.
9.Guíame, Yahveh, en tu justicia, por causa de los que me acechan, allana tu camino ante mí.
10.Que no hay en su boca lealtad, en su interior, tan sólo subversión; sepulcro abierto es su garganta, melosa muévese su lengua.
11.Trátalos, oh Dios, como culpables, haz que fracasen sus intrigas; arrójalos por el exceso de sus crímenes, por rebelarse contra ti.
12.Y se alegren los que a ti se acogen, se alborocen por siempre; tú los proteges, en ti exultan los que aman tu nombre.
13.Pues tú bendices al justo, Yahveh, como un gran escudo tu favor le cubre.
Kenneth y Filiberto volvieron a encontrase. Y esta vez en otro lugar volvieron a leer Kenneth estaba muy ansioso por ver – Krishna y Balarama se inclinaron a los pies de loto de Sus padres y les ofrecieron oraciones. Vasudeva y Devakí habían sufrido muchas dificultades debido a que Krishna era su hijo. Vasudeva y Devaki estaban completamente consientes de la posición elevada de Krishna como la Suprema Personalidad de Dios, por lo tanto no lo abrazaron, sino simplemente se pusieron a oírlo. A pesar de Krishna nació como su hijo Vasudeva y Devaki estaban conscientes de su posición-. “Y dijo uno de los hombres. Dios ha necesitado de la humanidad para manifestarse siempre. Sin embargo da reverencias a sus padres y eso hace referencia de su vehemente reverencia por su Creación. En todas partes” El otro hombre leyó el libro y dijo. -Desde una perspectiva Kabbalistica,la historia familiar de los árboles en el Jardín del Edén es una representación de dos realidades verdaderamente distintas. El árbol de la Vida representa una dimensión ilimitada por y para el tiempo y el espacio, sin ser tocada por los conflictos, enfermedades y muerte.-El otro hombre dijo esa es la verdadera razón dela existencia en todos lados la abundancia de Dios que lo tiene todo y es perfecto, enseñándonoslo cada vez a nosotros. – Los hombres respiraron y vieron hacia sus adentros como viendo hacia todos lados y un sentimiento de agradecimiento y alegría les reconfortaba. Fin.
"Cuando bajó del monte, fue siguiéndole una gran muchedumbre. 2.En esto, un leproso se acercó y se postró ante él, diciendo: «Señor, si quieres puedes limpiarme.» 3.El extendió la mano, le tocó y dijo: «Quiero, queda limpio.» Y al instante quedó limpio de su lepra. 4.Y Jesús le dice: «Mira, no se los digas a nadie, sino vete, muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que prescribió Moisés, para que les sirva de testimonio. 5.Al entrar en Cafarnaúm, se le acercó un centurión y le rogó 6.diciendo: «Señor, mi criado yace en casa paralítico con terribles sufrimientos.» 7.Dícele Jesús: «Yo iré a curarle.» 8.Replicó el centurión: «Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; basta que lo digas de palabra y mi criado quedará sano. 9.Porque también yo, que soy un subalterno, tengo soldados a mis órdenes, y digo a éste: "Vete", y va; y a otro: "Ven", y viene; y a mi siervo: "Haz esto", y lo hace.» 10.Al oír esto Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían: «Os aseguro que en Israel no he encontrado en nadie una fe tan grande. 11.Y os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se pondrán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los Cielos, 12.mientras que los hijos del Reino serán echados a las tinieblas de fuera; allí será el llanto y el rechinar de dientes.» 13.Y dijo Jesús al centurión: «Anda; que te suceda como has creído.» Y en aquella hora sanó el criado. 14.Al llegar Jesús a casa de Pedro, vio a la suegra de éste en cama, con fiebre. 15.Le tocó la mano y la fiebre la dejó; y se levantó y se puso a servirle. 16.Al atardecer, le trajeron muchos endemoniados; él expulsó a los espíritus con una palabra, y curó a todos los enfermos, 17.para que se cumpliera el oráculo del profeta Isaías: El tomó nuestras flaquezas y cargó con nuestras enfermedades. 18.Viéndose Jesús rodeado de la muchedumbre, mandó pasar a la otra orilla. 19.Y un escriba se acercó y le dijo: «Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.» 20.Dícele Jesús: «Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.» 21.Otro de los discípulos le dijo: «Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre.» 22.Dícele Jesús: «Sígueme, y deja que los muertos entierren a sus muertos.» 23.Subió a la barca y sus discípulos le siguieron. 24.De pronto se levantó en el mar una tempestad tan grande que la barca quedaba tapada por las olas; pero él estaba dormido. 25.Acercándose ellos le despertaron diciendo: «¡Señor, sálvanos, que perecemos!» 26.Díceles: «¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?» Entonces se levantó, increpó a los vientos y al mar, y sobrevino una gran bonanza. 27.Y aquellos hombres, maravillados, decían: «¿Quién es éste, que hasta los vientos y el mar le obedecen?» 28.Al llegar a la otra orilla, a la región de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, y tan furiosos que nadie era capaz de pasar por aquel camino. 29.Y se pusieron a gritar: «¿Qué tenemos nosotros contigo, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí para atormentarnos antes de tiempo?» 30.Había allí a cierta distancia una gran piara de puercos paciendo. 31.Y le suplicaban los demonios: «Si nos echas, mándanos a esa piara de puercos.» 32.El les dijo: «Id.» Saliendo ellos, se fueron a los puercos, y de pronto toda la piara se arrojó al mar precipicio abajo, y perecieron en las aguas. 33.Los porqueros huyeron, y al llegar a la ciudad lo contaron todo y también lo de los endemoniados. 34.Y he aquí que toda la ciudad salió al encuentro de Jesús y, en viéndole, le rogaron que se retirase de su término." (Mt8)
Avance Plenitud Sin Resentimientos.
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