Pequeño tratado sobre espiritualidad.

Salmo 121 Vayamos con alegría al encuentro del Señor. Canción para las subidas. Alzo mis ojos a los montes: ¿de dónde vendrá mi auxilio? 2.Mi auxilio me viene de Yahveh, que hizo el cielo y la tierra. 3.¡No deje él titubear tu pie! ¡no duerme tu guardián! 4.No, no duerme ni dormita el guardián de Israel. 5.Yahveh es tu guardián, tu sombra, Yahveh, a tu diestra. 6.De día el sol no te hará daño, ni la luna de noche. 7.Te guarda Yahveh de todo mal, él guarda tu alma; 8.Yahveh guarda tus salidas y entradas, desde ahora y por siempre. -Digamos, yo dormía y fui levantado otra vez por el Rav Berg, siempre está conmigo. Su imagen es luminosisima, entonces él va guiándome en lo que debo escribir para compartir. El me invita a que hable del sueño que tuve anoche. Soñé con mi abuela que murió el año pasado cuyo amor me sustento desde mi infancia, hasta su enfermedad. El Rav Berg estaba conmigo, y aunque ella sabía que estaba muerta fue una sucesión de viajes, pero El Rav Berg la alentaba, eso me lo dice ahora. Me da un poco de nostalgia, porque no les tengo físicamente a ambos pero este sueño sirvió para recordarme “sobre la eternidad del alma”. Bien ahora El Rav Berg me invita y me dice que hay mucha confianza en mi persona, desde alguien que desconozco, interesado en mi persona y que en algún momento ha de ayudarme, es pronto, y por eso su presencia se vuelve aún más fuerte conmigo. Me invita entonces a escribir sobre el capítulo de su libro. “La Educación De Un Kabbalista” el capítulo que nos ilustra su verbo donde explica. ¿Cómo nosotros podremos saber quién es verdaderamente espiritual? Antes de compartir su escrito el me vuelve a hablar del Profeta Elías, Jesús de Nazareth mi antepasado dijo –Han esperado Elías y Elías vino en la figura de Juan el Bautista- Sin embargo El Rav Berg al igual que Jesús invita a dejarle esa copa de vino tinto y darle un puesto en cada mesa de celebración Judía por Shabbat, puesto que a los ojos físicos no ven su persona pero él está en cada mesa Judía en las cenas de Shabbat. –Porque ahora soy como la nube, sobre el mar y como el fiel amigo, que llega a casa en busca de su bondad, para dar en nombre del Creador lo que pidas- Dice el profeta Elías ahora mismo. – Por eso es que en el sueño de anoche escuchabas a Paquita, para que pudieras discernir en tus escritos, y pudieras decir Polonia así podrían vislumbrar hacia donde te dirigimos esta mañana- dice El Profeta Elías. Y hacia el atardecer la paloma regresó a él, y he aquí, en su pico traía una hoja de olivo recién arrancada. Entonces Noé comprendió que las aguas habían disminuido sobre la tierra. (Génesis 8 11-12) Mientras que la paloma estuvo la primera vez viendo dónde posarse regreso una vez, al ser enviada otra vez, regreso con el racimo de olivo entre su pico, esto le dijo a Noé qué ya había tierra firme seca y arboles tranquilos y con hojas en plena floración, para que los humanos que bajasen comieran pronto y celebraran sacrificios. Según los estatutos de este momento, ya otros poseían, frutos para ser comidos tanto por los que en el arca se encontraban como por los animales. Noé volvió a enviar la paloma y está ya no regreso entonces el comprendió, que ya era hora de salir. Porque había un encuentro importante de la humanidad, tras ese enclaustramiento,” en el arca”, como le han pasado a muchos sabios en cuevas. Era la entronización de la alianza del Creador nuevamente ya con humanos ya con alma, vida y espíritu. Que habían sido salvados para “La Entronización de una Alianza Espiritual”. La primera fue al crear y dar vida a Adán y Eva, la segunda fue esta cuando la humanidad ya sabía lo bueno y lo malo y sabía de sobra, lo que suponía el libre albedrio. Noé hizo un sacrificio y un Arcoíris hablo de una alianza con él y sus descendientes. Me invitan a decir que los relatos sobre “El diluvio universal “hay en todas las culturas, pero he de centrarme en los descendientes de Noé. “Los Semitas” de aquí partirá, el inicio de una 5 Alianza, con los humanos,” todos que entre si están emparentados” y la muestra fue cuando la tecnología pudo hacer eco del mapa genético o ADN. Ahora mismo, llega una hija de Abraham de estas, que han venido persiguiéndome desde que encontré una Palera en el templo de Krishna “Parama Karuna”, interesada en Kabbalah, de las cuales yo rechacé su invitación de ir a una sociedad espiritista llamada Mamá Erika, en Petare Caracas. Siento más afinidad por Umbanda, me gustaría ir y tal vez lo haga. –es cosa mía- Esta quinta Alianza, fue anunciada en Jerusalén hace poco con el sonido celestial de trompetas que venían desde el Cielo. El Creador, está más que decidido a manifestarse con todo aquel que quiera de una manera sin juicios. Comenzando por los “Semitas” que han derramado tanta sangre en Holocaustos, así como otros pueblos y especies, la sangre de muchos de mi pueblo recientemente que ora por justicia divina, sin más sangre. Mi energía cambia cuando me encuentro con estas personas pero es una invitación del Rav Berg a suavizar los juicios porque ellos también saben lo que hacen. – El texto de esta mañana va de esta manera . – De acuerdo con la antigua saga conocida como el Vilna Gaon, la sabiduría interior de la Kabbalah es sagrada, mientras los literales y externos aspectos(De la Torah) son relativamente superficiales. Como el Gaon puso en , “La paja que hace arder el fuego(Para Dar Luz espiritual en sacrificio y honra) son los detalles de la pronunciación de las palabras con la cual(en oraciones, decretos, y servicios) se convierten en la piel más exterior de la Torah(Sin embargo hay algo más poderoso, más Luminoso, más espiritual y más profundo) . En esto no hay entendimiento colectivo de lo que supone el poderosísimo uso de las palabras y su pronunciación (Como manera de entrar por la Piel de la Torah con la Luz y amor como ha sido siempre hasta lo profundo de la Sabiduria). A pesar de que todos estas pertenecías de textos sagrados y “Alianzas”, que hablan de lo sagrado de la Torah, esto es simplemente una concha externa comparada con la sabiduría de la Kabbalah” -Si viene me invitan a compartir que este pequeño tratado es un llamado a los seres humanos que tienen, el poder del verbo para decretar y manifestar como lo tienen los animales que y todas los entidades vivientes e inanimadas en todos los universos y planetas, que proclaman la santidad del justo, la grandeza del creador, el deber de usar el verbo y acciones para el bien, para manifestar para ser co-creadores como lo es nuestro Padre Celestial, Creador máximo que invita a ser bueno como lo es el y dejar el juicio final a su Divinidad y Bendito Sea Él, Amén. Mientras me instruyo y capacito en entendimiento, ya celebro la felicidad de los Milagros y maravillas como lo es la Libertad y todas las mañanas del mundo en que puedo ver mi potencial, para ser bueno como mi Padre Celestial Bendito sea el viviente en mí y en ti y en todo Amén. Cuando bajó del monte, fue siguiéndole una gran muchedumbre. 2.En esto, un leproso se acercó y se postró ante él, diciendo: «Señor, si quieres puedes limpiarme.» 3.El extendió la mano, le tocó y dijo: «Quiero, queda limpio.» Y al instante quedó limpio de su lepra. 4.Y Jesús le dice: «Mira, no se los digas a nadie, sino vete, muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que prescribió Moisés, para que les sirva de testimonio. 5.Al entrar en Cafarnaúm, se le acercó un centurión y le rogó 6.diciendo: «Señor, mi criado yace en casa paralítico con terribles sufrimientos.» 7.Dícele Jesús: «Yo iré a curarle.» 8.Replicó el centurión: «Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; basta que lo digas de palabra y mi criado quedará sano. 9.Porque también yo, que soy un subalterno, tengo soldados a mis órdenes, y digo a éste: "Vete", y va; y a otro: "Ven", y viene; y a mi siervo: "Haz esto", y lo hace.» 10.Al oír esto Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían: «Os aseguro que en Israel no he encontrado en nadie una fe tan grande. 11.Y os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se pondrán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los Cielos, 12.mientras que los hijos del Reino serán echados a las tinieblas de fuera; allí será el llanto y el rechinar de dientes.» 13.Y dijo Jesús al centurión: «Anda; que te suceda como has creído.» Y en aquella hora sanó el criado. 14.Al llegar Jesús a casa de Pedro, vio a la suegra de éste en cama, con fiebre. 15.Le tocó la mano y la fiebre la dejó; y se levantó y se puso a servirle. 16.Al atardecer, le trajeron muchos endemoniados; él expulsó a los espíritus con una palabra, y curó a todos los enfermos, 17.para que se cumpliera el oráculo del profeta Isaías: El tomó nuestras flaquezas y cargó con nuestras enfermedades. 18.Viéndose Jesús rodeado de la muchedumbre, mandó pasar a la otra orilla. 19.Y un escriba se acercó y le dijo: «Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.» 20.Dícele Jesús: «Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.» 21.Otro de los discípulos le dijo: «Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre.» 22.Dícele Jesús: «Sígueme, y deja que los muertos entierren a sus muertos.» 23.Subió a la barca y sus discípulos le siguieron. 24.De pronto se levantó en el mar una tempestad tan grande que la barca quedaba tapada por las olas; pero él estaba dormido. 25.Acercándose ellos le despertaron diciendo: «¡Señor, sálvanos, que perecemos!» 26.Díceles: «¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?» Entonces se levantó, increpó a los vientos y al mar, y sobrevino una gran bonanza. 27.Y aquellos hombres, maravillados, decían: «¿Quién es éste, que hasta los vientos y el mar le obedecen?» 28.Al llegar a la otra orilla, a la región de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, y tan furiosos que nadie era capaz de pasar por aquel camino. 29.Y se pusieron a gritar: «¿Qué tenemos nosotros contigo, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí para atormentarnos antes de tiempo?» 30.Había allí a cierta distancia una gran piara de puercos paciendo. 31.Y le suplicaban los demonios: «Si nos echas, mándanos a esa piara de puercos.» 32.El les dijo: «Id.» Saliendo ellos, se fueron a los puercos, y de pronto toda la piara se arrojó al mar precipicio abajo, y perecieron en las aguas. 33.Los porqueros huyeron, y al llegar a la ciudad lo contaron todo y también lo de los endemoniados. 34.Y he aquí que toda la ciudad salió al encuentro de Jesús y, en viéndole, le rogaron que se retirase de su término. (Mt 8) Sabiduría.

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