Pueblo de monstros.

-Creo que es bueno, levantarse en la mañana y tener algo de meditación, algo que no sea preestablecido. La verdad que me ha parecido bastante aburrido el libro de la Autora Francesa Marie Madelanine La Fayette cuyo nombre es “ La Princesa de Cléves”. No se me esperaba algo más interesante. No lo termine, tal vez que de muy impresionado por el libro anterior que leí del autor chileno de José Donoso “ Coronación” en mis pensamientos ahora voy y me digo inspirado tal vez por el personaje de Doña Elisita Grey Avalos y su locura senil, y vida casi interminable, en algún momento era una radiante inglesa que llego a chile, su marido la engañaba y ella hacia el papel de mujer abnegada y silenciosa que como más tarde resultados en su mente convirtiéndola en una verdadera maquinare hilarante y brujíl de malas palabras, y achaques de la edad para con los otros personajes. Creo que todos los extranjeros que vienen a esta América nos siguen viendo como indios. Así como doña Elisita auhunado a esta religión castrante católica que me apasiona me pero que me mantiene fuera de la iglesia. –Nada más transgresor, risible tonto y brillante, como que te llamen Pecadora en el siglo 21” A veces Bromeo con esa palabra en mi mente y me llamo en silencio :” Pecadora,Pecadora ,Pecadora” y termino riendo mucho se ha convertido en una terapia o más bien una riso terapia con un fármaco que está hecho de pensamientos y palabras así como por ejemplo “Pecadora”. (Kuas Kuas Kuas) La Princesa de Cléves creo grandes expectativas en mí, puesto que su prólogo hablaba de que era la primera novela Psicológica de la historia, en realidad termino siendo si es verdad una pequeña venta de las intrigas de la corte de Francia, de chismes sobre los amoríos de la corte y una hermosa mujer que tenía un buen esposo y que un hermoso hombre la cortejaba se la pasabam en un culipandeo que no llegaba a nada, pero que eso estaba muy bien visto de las aventurillas amorosas en la corte de Francia, por allá en un tiempo después del reinado de Francisco I me gustan las exactitudes cronológicas, este libro es de 1678 ya ha comenzado el barroco como grito estilístico de occidente, pero me he sorprendido de la medievalidad de la corte de Francia y destellos renacentistas que la hacen a los ojos del lector “Una verga de Barco en penumbras de fuegos artificiales en una neblina”. Pues continúe con otro libro de la biblioteca básica de Salvat este se llama “Narraciones” de Antón Pávlovich Chéjov un hospital psiquiátrico en la Rusia Zarista de una ciudad desconocida, donde personajes inverosímiles como el Judío Moseika atrapan la atención el doctor y su pensamiento de “Esto era lo que querían que estudiara mis padres, ahora trato de hacerle ver a la sociedad que soy bueno en lo que hago y venga al buche mucha cerveza y Vodka” El otro personaje que me impresiono es un joven hombre que sufre de trastornos de persecución y que tiene una conversación con el doctor tan Gay que me conecto a las conversaciones de Carlos y Andrés en “Coronoción”. Mientras que los Rusos querían ser Alemanes desde que Pedro el Grande se fue a Europa para modernizar su corte, los Chilenos han querido ser del primer mundo, y los Venezolanos otroras neutros, ahora somos una sarta de monstros. Fue al Hospital central de la Universidad de Venezuela en mi calvario personal de ser atendido por un médico y me puse a leer “Narraciones de Chejov” era impresionante la similitud de los personajes pueriles que estaban sentados en las gradas de sillas de sala de espera y lo que lei, incluyéndome a mí con mis zapatos rotos y una chaqueta que había encontrado en la calle, la tenia puesta que dispersaba partes de semi cuero, mientras esperaba por mi audiencia con el doctor, que resulto ser doctora muy amable pero que sin tocarme me llamo que “Era Responsable” con mi enfermedad del VIH, aunque me veo como si me está pasando un tren por encima en este mismo momento el halago me resulto como esos piropos que le gritan los malandros a las tipas culonas de las calles de Caracas, sólo recuerdo que estoy tan flaco que hasta mi redondo culo también lo he perdido. Después de tres meses esperando por los antirretrovirales, la doctora sin tocarme me dio algunos récipes yo me le mostré la dentadura como lo haría un vampiro pero en realidad era que me estaba riendo de la situación “Harta Tediosa” de ir a un hospital sin insumos y que te manden récipes, para que busques tú mismo tu curación. Con gingivitis voy por la vida leyendo ahora a Chejov, perseguido por monstros mentales que me he creado yo mismo más los que pululan y camina por las calles de esta Venezuela de Socialista del Sigo 21 donde no hay un coño. ¿Qué es lo que sucede?- Que, tanto Marx como, Nietzsche, que tanto intelectuales como gente bruta se olvidó de un país que era en realidad un paraíso. Marx le hecho una gran vaina a los Rusos y a su época Zarista, que pretendía ser Alemana. Los cubanos llegaron como sopla basteces con sus prácticas de brujería y socialismo y nos echaron a perder la vaina de una Venezuela fiestera. Ahora en mi barrio cuyo el título de este texto le dedico me da nauseas pero es donde vivo, y sería como cogerme, embarazar y golpear al punto de muerte a la India Estela de “Coronación” Entonces llega Chejov y me da una bitácora de lo que sucedía en los hospitales psiquiátricos rusos, unos personajes impactantes, que me hacen odiar y amar los sistemas de teatro de Fiódor Mijáilovich Dostoyevski,y Konstantín Stanislavsk Microteatro versón , Caracas los actores y actrices, los locutores de radio, los cómicos las Drag Queens, los críticos de cine, los Directores de cine sin talento , la Profesoras universitarias, o de escuelas de tareas dirigidas, la neutralidad Suiza, todo lo que ha pasado y me pasa. Amar a la Vaganova y su sistema que se me metió en la cabeza diciéndome que soy un mal bailarín clásico dándome una patada por el culo a mí y a mis sueños de convertirme en alguno. No prometo que siga leyendo a Chejov pero removió monstros en mi cabeza, y los vi caminando por esta Venezuela, con un poco de esas intrigas de la corte de Francia de la “Princesa de Cléves” me encontré un coñazo de libros regalados de esta Biblioteca Básica de Salvat me lleve cuantos pude la primera vez regrese y me lleve los que quedaban. Habia una nota en el suelo del muro de la “Plaza de los Palos Grandes” que decía “ Puede llevarse 1, 2, 3 libros de esta colección son gratis” Yo me los lleve casi todos, ahora veo que son como una caja de pandora. Que me muestra mi paupérrima situación laboral, mi hambre perenne, mi estado físico que asusta, mi arrechera contenida que no sé cómo cagarla, hacia este país que se lo llevo quien lo trajo y me digo en esta mañana. –“Pecadora, pecadora, pecadora”- Y me cago de la risa.