La Libertad Del Ser.

Abrazo Firme De Mi Padre. Salmo 110. "De David. Salmo. Oráculo de Yahveh a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que yo haga de tus enemigos el estrado de tus pies. 2.El cetro de tu poder lo extenderá Yahveh desde Sión: ¡domina en medio de tus enemigos! 3.Para ti el principado el día de tu nacimiento, en esplendor sagrado desde el seno, desde la aurora de tu juventud. 4.Lo ha jurado Yahveh y no ha de retractarse: «Tú eres por siempre sacerdote, según el orden de Melquisedec.» 5.A tu diestra, Señor, él quebranta a los reyes el día de su cólera; 6.sentencia a las naciones, amontona cadáveres, cabezas quebranta sobre la ancha tierra. 7.En el camino bebe del torrente, por eso levanta la cabeza." - Esta mañana yo me he levantado y como siempre he leído al Rav Berg. Él siempre me habla a través de su libro “ La Educación de un Kabbalista” desde la mañana hasta que me acuesto. Su rostro es dulce y su actitud hacia mí de gran abuelo y familia. Nunca he pensado en la locura desde que leí este libro. Pero debería contar que lo compre en inglés, y que cada porción que comparto, la he traducido yo mismo usando mis conocimientos de esta lengua que no es la mía pero creo que desde que vi el libro sentí que el Rav Berg quería que yo tradujera, él me quiere más cerca de la Kabbalah cada vez, yo he cambiado tanto. Y sigo cambiado, pero sé que mi corazón se abre cuando leo este libro y el deposita tantas cosas en mí. Ahora cierro los ojos y respiro y escucho que él me pide un cuento. La Fuente. Un hombre limpiaba los alrededores de una plaza de una gran ciudad. Este hombre amaba su ciudad y sabía de memoria la historia de su país, pero con mayor esmero la historia de su ciudad. Aunque, cuando veía turistas de otros países hacía gala de sus conocimientos –Y les preguntaba- ¿De dónde es usted? – Y cuando le decían el país, el hombre se iba en halagos históricos de aquel lugar lejano que nunca había visitado. Los turistas extranjeros se quedaban perplejos y se tomaban fotos con él. Muchos regresaban por su sorpresa, con paisanos y el hombre que limpiaba sacaba a relucir otros detalles nuevos. -¡Qué sorpresa es usted!- decían. Y Le invitaban a comer o le traían regalos al buen hombre. Este los aceptaba pero sin ninguna vergüenza decía, que le encantaba hacerles un regalo a los turistas- ¡Sí! que se llevaran lo mejor impresión de su ciudad al verse reflejados en sus propios lugares de origen, que eran parte de un gran propósito de unidad universal- Aquel hombre no había estudiado, pero amaba barrer esta histórica plaza y se le veía alimentando a los animales que ahí habitaban. Como los pájaros y las ardillas. Les había puesto orden a los perros callejeros para que no ladraran a los visitantes y hasta les hizo un número, hablaba con los gatos y también hacían parte del número. Les dejaba comida a los ratones y ratas y les decía que no salieran porque la gente se asustaba, las invitaba a que usaran su inteligencia para mantenerse limpias. A las palomas les cantaba y les daba arroz y estas volaban y se sentían tan a gusto con él buen hombre. Una tarde un periodista que había recibido un mail de un amigo recordando aquella visita a esa plaza se fue en elogios con el barrendero de la plaza y le dijo que le hiciera un reportaje puesto que este hombre era- con toda certeza- una biblioteca de calor humano, y risueñas anécdotas de la historia universal. El periodista le entrevisto y se quedó sorprendido puesto que el buen hombre de inmediato le pregunto a el primero.- ¿De cuál universidad ha salido usted buen joven?- Al responderle el periodista el barrendero le dijo, sobre la historia de aquella Universidad, los momentos más relevantes de esta y sus ilustres Rectores. Su famosa compañía de teatro estudiantil y la de danza, pero por sobre todo la labor de la facultad de medicina con los más desamparados. –Es la primera vez joven, que hablo con un distinguido periodista tae grasado su excelsa “Alma Mater”. Veo que es usted reflejo de las glorias de buena enseñanza de sus maestros y del esfuerzo de sus años de estudio- El Periodista respiro y recordó sus años de estudio y se propuso hacer un gran reportaje, puesto que había conseguido un héroe silente que barría la plaza con, amor, respeto y responsabilidad. Entonces el periodista le pregunto – Mi buen Señor ¿Cuál es la parte que más ama de esta plaza?- y el hombre le dijo – Joven yo amo y venero con respeto la fuente de esta plaza, de incomparable belleza, muchas plazas tienen pozos de los deseos y esta no escapa a aquello se ven los enamorados alrededor de ella abrazados y los turistas echando monedas de la suerte, pero esta fuente solo recuerda la gran magnitud de ser libres como los elementos así vayan cambiando los siglos. Su canto de agua es como música y voces y su rocío como joyas de luz en cualquier día. A mí “La Fuente” me deleita y me trae recuerdos de mis años mozos y de los que están por venir.- El Periodista quedo embelesado y en el semanario del domingo, todo el país se enteró del barrendero de la plaza. El hombre era locuaz y acertado en sus comentarios y la gente quería más de su ingenio y tesoros guardados en sus memorias- Al preguntarle si había estudiado el periodista- El hombre sólo respondió – El estudio es parte de los que aman algo más allá que un oficio, pero más que un oficio para mi es barrer y leer- Al periodista le brillaron los ojos y le indico al fotógrafo que le hiciera varias fotos. –El domingo le traigo el periódico- le dijo el periodista y así fue. Ese domingo el hombre se vio en el periódico y rio mucho, se reía, nunca había soñado con aquello. – El periodista le agradeció y le invito a almorzar mientras la gente decía es el barrendero de la plaza el que ama la fuente en el restaurant- Se tomaban fotos con él por ser un cofre de sabiduría, amabilidad y humildad. El hombre siguió en su trabajo ese domingo y desde entonces se le dejo de llamar el barrendero de la plaza para llamarle. El Hombre de la fuente de La Sabiduría”. Fin. "Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. 2.Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo: 3.«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. 4.Bienaventurados los mansos , porque ellos posseerán en herencia la tierra. 5.Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. 6.Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados. 7.Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. 8.Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. 9.Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. 10.Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. 11.Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. 12.Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros. 13.«Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los hombres. 14.«Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte. 15.Ni tampoco se enciende una lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa. 16.Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. 17.«No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. 18.Sí, os lo aseguro: el cielo y la tierra pasarán antes que pase una i o una tilde de la Ley sin que todo suceda. 19.Por tanto, el que traspase uno de estos mandamientos más pequeños y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los observe y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos. 20.«Porque os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos. 21.«Habéis oído que se dijo a los antepasados: No matarás; y aquel que mate será reo ante el tribunal. 22.Pues yo os digo: Todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el tribunal; pero el que llame a su hermano "imbécil", será reo ante el Sanedrín; y el que le llame "renegado", será reo de la gehenna de fuego. 23.Si, pues, al presentar tu ofrenda en el altar te acuerdas entonces de que un hermano tuyo tiene algo contra ti, 24.deja tu ofrenda allí, delante del altar, y vete primero a reconciliarte con tu hermano; luego vuelves y presentas tu ofrenda. 25.Ponte enseguida a buenas con tu adversario mientras vas con él por el camino; no sea que tu adversario te entregue al juez y el juez al guardia, y te metan en la cárcel. 26.Yo te aseguro: no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo. 27.«Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio. 28.Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón. 29.Si, pues, tu ojo derecho te es ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo sea arrojado a la gehenna. 30.Y si tu mano derecha te es ocasión de pecado, córtatela y arrójala de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo vaya a la gehenna. 31.«También se dijo: El que repudie a su mujer, que le dé acta de divorcio. 32.Pues yo os digo: Todo el que repudia a su mujer, excepto el caso de fornicación, la hace ser adúltera; y el que se case con una repudiada, comete adulterio. 33.«Habéis oído también que se dijo a los antepasados: No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos. 34.Pues yo digo que no juréis en modo alguno: ni por el Cielo , porque es el trono de Dios, 35.ni por la Tierra, porque es el escabel de sus pies; ni por Jerusalén , porque es la ciudad del gran rey. 36.Ni tampoco jures por tu cabeza, porque ni a uno solo de tus cabellos puedes hacerlo blanco o negro. 37.Sea vuestro lenguaje: "Sí, sí"; "no, no": que lo que pasa de aquí viene del Maligno. 38.«Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. 39.Pues yo os digo: no resistáis al mal; antes bien, al que te abofetee en la mejilla derecha ofrécele también la otra: 40.al que quiera pleitear contigo para quitarte la túnica déjale también el manto; 41.y al que te obligue a andar una milla vete con él dos. 42.A quien te pida da, y al que desee que le prestes algo no le vuelvas la espalda. 43.«Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo. 44.Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan, 45.para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos. 46.Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener? ¿No hacen eso mismo también los publicanos? 47.Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles? 48.Vosotros, pues, sed perfectos como es perfecto vuestro Padre celestial." –(Mt5) Feliz fin de semana y si también con amor y alegría Shabbat Shalom.